AQUELLOS MARAVILLOSOS AÑOS...O ...¡NO!

A veces es bueno soñar despierto aunque quede desterrado todo en el pozo de la desilusión.
No sé muy bien si en este caso es desilusión espolvoreada con cierto alivio.
Los días previos al domingo había estado nerviosilla porque tras una breve descripción física y aquél punto sobre que nuestro humor era parecido me habían puesto en bandeja que tras muuuchos años me iba a volver a encontrar con Diego.
Mi imaginación se había puesto a izar sus velas y acampaba por libre.Sabía que trabajar con él,si es que era,podría ser divertido en el momento que saliera aquella historia juvenil sin demasiada importancia ,o bien,una situación incómoda por algo no del todo resuelto y que convirtiera cada quedada en alguna tirantez.
Lo cierto es que yo estaba dispuesta a sacarle punta a todo y pensaba que el encontrarnos tras no volvernos a ver en casi dos décadas podría ser el futuro de una larga amistad.
Hacía un día estupendo y para la primera vez tras el día de campo había propuesto que comiéramos en su casa sus dos amigas y yo.
En el coche tenía que hacer esfuerzos para no pensar demasiado y me había propuesto dejarme llevar saliera como saliera.
Ya junto a la casa,su coche tardó más de lo que yo esperaba en llegar a la verja .Mis ojos estaban como platos,pero¡claro!
entre las gafas de sol,los cristales y mi miopía...poco pude esclarecer.
Las personas podemos cambiar ,evolucionar,a unas las trata mejor el tiempo...pero nada más bajar del coche supe que no era él.
Qué situación tan extraña,no sabía si reir a carcajadas o soltar alguna lagrimita,no por nada,pero a veces me habría encantado saber qué ha sido de tanta gente y de sus vidas.
La descripción de mi amiga no fue muy acertada,porque de rubio o castaño el muchacho en cuestión no tiene mucho la verdad.
Así que ahora sólo queda ir conociendo "al impostor" que espero que no haya robado su vida y le esté suplantando y haya usado su identidad pensando que va a colar y que nadie se va a dar cuenta.
Lo más divertido es que su padre que de simpático tiene lo justo (y que no nos dejaba hacer mucho sin su supervisión en aquél pedazo de tierra)se parece más al chico que yo vi aquél día de verano entre un grupo de clase,pero con treinta años más.
Curiosa la vida,curiosa la coincidencia y curioso aqúello que engloba un nombre de persona.
A veces las personas del mismo nombre tienen rasgos que se parecen ...otras no.
Ya, la curiosidad tras estos años me ha hecho buscar una foto en la que tanto deporte le ha hecho envejecer más de la cuenta y ya no se parece mucho a quien un día conocí,es más,creo que ni siquera le habría reconocido si me hubiera encontrado con él por alguna de estas calles.

*P.D.Voy a flagelarme un rato por culpa de mi fantasía,aunque mejor pensado quizás me alegre y me aleje del mundanal ruido más de lo que pienso.Así que,tras mis risas con los teatreros sobre la posible performance de la sintaxis...
me veo haciendo una de verdad sobre el Eneagrama...jajajjajajajjajaja