ESPERANDO QUE LAS HORAS CADUQUEN

Enero al final vence.Acaba de estrenar año y parece que va a ser algo soleado y que aunque traerá frío, pues saldrás indemne de él para transitar por Febrero con un alma más propia de otra estación;pero no.
Esto pasa por tus descuidos ,por alentar la alegría y desescombrar las tristezas .Por tratar de enterrarlas por tiempo indefinido han venido a saludar y poblarte de nubarrones y ojeras y darte ese rictus serio que en tu cara de muñeco queda como una palabra de esas impronunciables que tanta risa te dan.
Pero hoy no puedes reír,queres pegar hostias a los transeúntes que van con esa cara de color verde pardo que es la que orresponde a esta estación y no te enteras.Y desentonas entre los loros de buenas maneras y carcajadas huecas...y quieres que el viento te lleve a otro lugar,descalzo y con apenas equipaje.
Y te enfadas contigo...y con el mundo.Y buscas los números capícua y las señales,que te digan cómo actuar y qué no afrontar.Y desentonas,y te asqueas.Te vuelves verde como los demás,pero fluorescente,porque el invierno te ha cogido al despertar y te ha pillado por sorpresa y sin provisiones.