domingo, 21 de septiembre de 2014

BAJO DISTINTA LUPA


Anoche se  me rompieron los esquemas, es lo que tiene salir sin muchas ganas y un poco más de cerveza de la cuenta. Me encontré sin saber cómo entre dos mundos y sin saber muy bien cuál era el real. El mundo depresivo y desilusionante de mi amigo o el mío que a pesar de todo y grandes altibajos sigo pensando que queda mucho por hacer y que si por alguna razón bastante posible de aquí a un par de años tuviera que mudarme, sería una gran oportunidad. Supuestamente es mi joven edad, así que me tengo que apresurar que al parecer a partir de los cuarenta la cosa cambia y sientes que tienes que correr porque se acaba todo. En parte eso le pasa a otras amigas con las que choco debido a esa supuesta ingenuidad. No sé yo, vivo en una ciudad muy bonita pero en la que a veces me ahogo y no soporto estar, he llevado una vida durante años recluida casi cuidando delos demás y dejando mis prioridades de lado y apenas veo a la persona que hace que todo se vuelva menos denso y que sigue ayudándome a que mis sueños se hagan realidad. Quizás ese sea un buen impulso aunque su trabajo nos de poca cancha, pero creo que ya va en uno y sí...me caigo, me desilusiono, me parece el mundo feo no lo siguiente pero hay pequeñas cosas y algunas personas, muy pocas, que todavía consiguen que pueda no sólo soportarlo sino que sin apenas nada tenga ganas de levantarme y hacer un poco más y volver a ser no a tiempo parcial ,sino al completo, la persona que siempre he tenido y he querido ser. Eso sí cada vez haré caso a mi intuición que parecer afinar un poquito más cada día. Bueno, guachos, el próximo será una lista de cosas que hacer antes de cambiar cuando cumpla cuarenta y promete...no esperéis nada parecido a ser madre, ser mejor persona o  volver a entrar en la 38;ya se sabe hijos únicos y con un padre que quería aniquilar la imaginación sumado a una gran rebeldía...es un cóctel cuanto menos ,interesante.

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