jueves, 28 de agosto de 2014

DUENDE

No habitaba en ningún sitio en concreto y a la vez dormitaba en todos
Estaba entre los alambiques con un alquimista y detrás de las cortinas

Aparecía y desaparecía...
Entre las dunas y en las palmeras; en un mar en calma y en la tormenta
En los rincones del alma y entre tinieblas
En amantes propios y ajenos, en animales humanos y humanos animales

No hay comentarios:

Publicar un comentario