martes, 14 de mayo de 2013

ABRAZANDO CONTRADICCIONES

Y sigo empeñada en lo imposible y no se crea señor juez que no hago mis pequeños progresos ni pinitos. Y mira que cuesta...porque a veces esta maldita talasemia creo que me devora mucho más de lo que yo quisiera porque se agrava con todo, con la melodía matutina al ver el barco a la deriva. Como dice la canción "TE DARÉ MI CORAZÓN PARA QUE JUEGUES CON ÉL" porque sólo ella le ha sabido entender. Eso, o paso al "EN NOCHES COMO LAS DE HOY VUELVO A BRILLAR".
Es obvio que cada uno tenemos un mundo muy particular forjado por una educación, por experiencias, por miedos por lo vivido y otros inculcados. Yo no me resigno a pesar de todos los nubarrones y quiero conseguirlo pero siempre tengo mil cosas  a la contra y una va a contracorriente. Desde luego que si salimos de esta sólo los que allí estuvieron sonreirán. Me toca tirar  del mástil e izar velas pero a veces mi oculta aunque leve enfermedad hace que no pueda ni sostener un  tenedor con la fuerza que quisiera y se me escapa la sopa de letras por todas partes. Metáforas absurdas que sólo yo podría explicar, aparte, me pregunto cuando se volvió todo tan complicado y descolorido . Él se cansa y lo noto y me esfuerzo pero no puedo evitar ese remolino que me invade al sentirme tan triste por todo lo que he ido perdiendo en estos últimos cinco años. No me gusta dar pena y me muestro mucho más fuerte y entera pero a veces yo misma soy la única que se tiene para darse ánimos. Algunos dicen, si nos tienes, estamos contigo...pero todas las tardes del mundo salvo benditas excepciones yo estoy aquí en un "mí me conmigo" que a veces desata todo lo que no he podido descifrar, ni pausar para encajarlo . No ha habido tiempo, y me come por dentro.  Llega la Navidad, o mi cumpleaños y las sillas están vacías...y yo, no encuentro consuelo. Ni los mejores regalos ni la mejor fiesta puede arreglar nada de esto. El tiempo, aceptarlo...pero hoy sé que pese a mis esfuerzos no puedo seguir así, al menos hoy no porque no puedo permitirme enfermar. Hoy tengo una cita, lo he decidido, para mí es una derrota pero voy a probar. Sólo quiero que me escuche alguien externo, sin falsas palmaditas en el hombro para poder dejar mi pesada mochila. Me ha gustado su voz y sé que no va a ser un amigo y eso es lo que quiero. No un amigo que crea que por tu simpatía y complicidad y porque estás en la peor situación hay barra libre. No sé si el mundo está loco o yo estoy demasiado cuerda a pesar de los lapsus, pero vamos a ver si encuentro algo de objetividad y charlar con alguien algo inteligente me vendrá bien. 

3 comentarios:

  1. Espero que si fuera algo inteligente y haya sabido escucharte, se percibe que lo necesitabas.

    No te rindas. A base de cabezazos se rompen los muros.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La verdad es que ha estado bien por ahora, nada convencional, como a mí me gusta. Está claro que de cualquier experiencia se aprende y yo me rindo dos días y al que dice tres...se acabó! jejejje Gracias y bienvenido a este barrio Guille!

      Eliminar
    2. me gusta lo que no es convencional, lo que fluye naturalmente.

      Eliminar