lunes, 18 de febrero de 2013

VERANO EN LA BARROSA



Aún espero al viejo autobús que me lleve  a esa inmensa playa de pergamino.La mañana amanece con alguna que otra nube.Mientras, escucho la última cinta de Modestia Aparte casi recién salida del horno en mi viejo walkman, que gané en mi primer concurso literario. Saboreo el olor a salitre en el ambiente que hace que mi pelo de por sí rebelde se muestre más enmarañado que de costumbre.Está claro que va en consonancia con mis pensamientos.Hace un día plomizo de bochorno y desapacible e intento disipar las mariposas que tengo en el estómago de sólo pensar que en unas horas he quedado con él.Me horroriza una primera cita y mientras escucho la voz de Fernando cantando "Cosas de la vida" imagino mil y una posibilidades.El tiempo,algo que por un instante  disipe mi nerviosismo,es casi  propio del mes de Septiembre.En el aire huele a otoño,o quizás es mi pensamiento que está dando saltitos arrugando mi mañana de verano ya sin clases.
El autobús camino del pueblo y rumbo a  la playa huele a noticias frescas de la mañana,a barrio de pescadores y a los mejores veranos de mi vida  a pesar de los sinsabores y de las primeras decepciones.Me siento libre a pesar del traqueteo del autobús color amarillo que me lleva a mi playa que es el bálsamo de todos mis males.
Cuando llego apenas hay gente,al fin y al cabo es un martes cualquiera, aún sin apenas veraneantes.
Dos chicos corren tras un balón de Nivea que parece pitorrearse de ellos pues parece inalcanzable,la chica del biquini a rayas parece inmersa en un libro de Ángeles Caso y sólo abandona su tarea cuando pasan los socorristas luciendo bronceado.Todo parece sereno,liviano.Sin duda, ha sido tocado por una varita mágica porque roza lo divino.
Extiendo con lentitud mi inmensa toalla color verde hierba sobre la arena que quema indolente los dedos de mis pies y poco a poco el sol empieza a asomarse entre las suaves nubes de algodón de azúcar.Me tumbo e imagino mil y una formas...y respiro.Mis sentidos se deleitan con cada sensación.El agua transparente,el aire cálido que hace bailar las sombrillas y el primer baño de la temporada en el mar.Imagino todo lo que ha visto, todas las historias que podría contar.A la derecha en pequeños estanques naturales juguetean los camarones mientras alguna pareja de adolescentes se besa al amparo de una cueva excarvada en las rocas.A lo lejos ,el castillo de Sancti Petri ,y sobre las rocas la casita del acantilado con su torreta.
Quizás no fue el mejor verano,quizás este este por venir...pero sí es cierto que echamos de menos aquello que pasa al recuerdo.
Por unos maravilllosos instantes,no soy nada ni nadie;y mi cita de las nueve  junto a la piscina es algo espumoso y lejano.Tal vez un helado, unas risas ...y todo salga a pedir de boca o... la Bridget Jones que llevo dentro y que aún en este instante no conozco, acabe en la piscina con su ropa totalmente mojada y calada hasta los huesos;pero justo ahora,y sólo en ese preciso instante, todo es absolutamente perfecto,invariable...inalcanzable.
 
Hoy ,añoro esos días de vino y rosas...o más bien, de arena dorada,sombrillas de rayas e intenso olor a mar.

7 comentarios:

  1. Que bonito, poder describir con esa claridad los recuerdos, quisiera tener ese don.

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    1. Ya sabes..memoria fotográfica,jejeje aunque no siempre es positivo para algo sirve.Graciasss!!!

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    2. La verdad es que es en estos momentos, en que se disparan las palabras,cuando te das cuenta de las cosas que has vivido y todo lo que has recorrido.

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  2. Una terraza dorada para un día gris. ¡Me gusta! (Ahora se me ha pegado "Cosas de la edad")

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    1. La verdad es que en estos días tan tristones viene bien pasearse por escenarios más alegres y soleados.De hecho hoy ...más que necesario!Hay canciones que se graban y no se despegan jejeje

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